Hoy he recibido este poema de nuestra querida poeta Chantal Maillard.
Dice querer compartir con nosotros.as su “malestar animal” contra la exterminación indeterminada de las cotorras argentinas, y de los jabalíes que llegan a los parques de nuestras poblaciones “asustando a los niños”.
“A falta de otras armas”, este poema-proyectil sigue siendo un “arma cargada de futuro” tal y como quería Gabriel Celaya, para nuestro presente aciago…
Pasen y lean y, acto seguido, no dejéis de cotorrear, graznar, aullar, jabalear, murcielaguear este poema por doquier!

MALESTAR ANIMAL
Han decidido exterminar a las cotorras
en Madrid.
Dicen que alborotan y se queja el vecindario.
Dicen que desplazan a los gorriones.
Que estropean los árboles del parque.
Que proliferan demasiado. Dicen
Que el gas letal que van a utilizar
cumple con la ley de bienestar animal.
Mi animal ha decidido
exterminar a los humanos.
Dice que espantan a los otros animales.
Que alborotan de día y de noche no descansan.
Que talan e incendian los bosques del planeta.
Que proliferan y destrozan
arrasan y saquean la tierra que no les pertenece.
Dice que ha decidido exterminar
a los humanos incapaces
de convivir con jabalíes en sus parques
y que al hacerlo cumplirá
las leyes naturales.
Yo para complacerle
voy a criar jabatos en el huerto de mis manos
ofidios en mi casa-hueso
y murciélagos en la cueva de mis ojos.
Voy a criar cotorras.
Y esplendorosos cuervos que al amanecer
le despierten como antaño
en los bosques de Goa.
© Chantal Maillard
© Pintura de Kubo Shunman, ‘Tres cuervos graznan contra un sol naciente’ (Período Edo)