La Mujer (Shakti) es la creadora del universo,
el Universo es su forma;
la Mujer es el fundamento de los mundos,
ella es la forma verdadera del cuerpo.
Adopte la forma que adopte,
la de un hombre o la de una mujer,
es la forma superior.
En la Mujer reposa la forma de todas las cosas,
de todo lo que vive y se mueve en el mundo.
No existe joya más preciosa que la Mujer,
ni condición superior a la suya.
No existe, nunca existió y nunca existirá
un destino parecido al de la mujer;
no hay reino, ni fortuna
comparable a una mujer;
no existen, nunca existieron, nunca existirán
lugares sagrados similares a la Mujer.
Ninguna oración iguala a la Mujer,
ni fórmula mística ni ascesis
que valgan la Mujer.
No existe, nunca existió y nunca existirá
una riqueza más valiosa que una Mujer.
Shaktisangama Tantra II.52
Imagen:
El triángulo primordial, símbolo de Shakti, la Diosa Suprema. Rajasthan, siglo XVII, gouache sobre papel.
Este yantra (instrumento diagramático que favorece la concentración) representa a Shakti, el aspecto femenino de la divinidad. Los tres lados del triángulo — yoni —representación de la vulva, la matriz creativa del cosmos— con sus tres colores: negro, rojo, blanco, simbolizan a las tres gunas, 3 cualidades que componen todo el universo: sattva (luz, serenidad, discernimiento), rajas (energía, pasión, movimiento), tamas (ignorancia, inercia, oscuridad).